Rectoscopia
La proctoscopia es una prueba en la que se examina el interior del ano y el recto. El recto es la última parte del intestino grueso (colon). El ano es la abertura del recto hacia el exterior del cuerpo. En esta prueba se usa un instrumento llamado rectoscopio. Ayuda a encontrar la causa del dolor o sangrado. La rectoscopia también puede ser útil para examinar las hemorroides u otros problemas rectales.
Preparación para el estudio
Hágale a su proveedor de atención médica todas las preguntas que tenga sobre el procedimiento. Estas pueden incluir lo siguiente:
-
¿Por qué necesito este procedimiento?
-
¿Cuántas veces ha realizado este procedimiento?
-
¿Cuándo tendré los resultados?
-
¿Cuáles son las posibles complicaciones?
Después de que sus preguntas se respondan a su satisfacción, siga las instrucciones de su proveedor de atención médica.
Informe a su proveedor de atención médica sobre todos los medicamentos que usa. Por ejemplo:
-
Todos los medicamentos recetados
-
Medicamentos de venta libre, como aspirina o ibuprofeno
-
Drogas ilícitas
-
Hierbas, vitaminas y otros suplementos
Quizás tenga que dejar de usar algunos de estos medicamentos o todos antes del procedimiento. Siga todas las indicaciones que le den sobre no comer ni beber nada antes del procedimiento.
Le pedirán que se haga un enema o que tome un laxante suave antes de la prueba. Esto es para limpiar el recto. Siga cuidadosamente las instrucciones de su proveedor de atención médica. No use un enema ni un laxante, a menos que se lo hayan indicado.
El día de la prueba
Antes de la prueba, le pedirán que firme un documento que se llama formulario de consentimiento informado. Este contiene información sobre el procedimiento. Menciona los riesgos y beneficios de esta prueba, así como las alternativas al procedimiento. Tendrá la oportunidad de hacer preguntas antes de firmarlo. Asegúrese de evacuar todas sus dudas y de estar conforme con las respuestas antes de firmarlo y aceptar el procedimiento.
El procedimiento lleva aproximadamente 10 minutos. Puede volver a su casa ese mismo día. Por lo general, no es necesario usar anestesia.
Durante el procedimiento:
-
Se acostará de lado, sobre el costado izquierdo y con las rodillas dobladas. O bien sobre la espalda y con las rodillas levantadas hacia el pecho.
-
El proveedor de atención médica examina el recto con un dedo enguantado y lubricado. Buscará puntos dolorosos o bloqueos.
-
Se introduce cuidadosamente el rectoscopio lubricado en el ano. Es normal que sienta algo de cólico o ganas de evacuar cuando le introduzcan el tubo. En algunos casos el proveedor de atención médica podría tomar una o más muestras de tejido (biopsias). Esto se realiza mediante la introducción de instrumentos diminutos en el recto a través del rectoscopio.
-
Una vez finalizada la prueba, se saca el rectoscopio.
-
Es posible que le digan los resultados del examen de inmediato. Si le hicieron una biopsia, la muestra se examinará en un laboratorio. Los resultados tardarán unos días, tal vez una semana.
Después del procedimiento:
Podrá regresar a casa manejando usted mismo y reanudar sus rutinas normales de inmediato.
La recuperación en el hogar
Una vez que esté en su casa, siga las instrucciones que le hayan dado. Es posible que tenga un poco de sangrado en las primeras evacuaciones. Suele suceder si le hicieron una biopsia. Esto es normal.
Cuándo llamar al proveedor de atención médica
Llame a su proveedor de atención médica en cualquiera de los siguientes casos:
-
Fiebre de 100.4 ° F ( 38 ° C) o superior, o según lo indicado por su proveedor de atención médica
-
Una gran cantidad de sangre en las heces o sangrado que dura más de unos días
-
Dolor abdominal intenso o dureza e hinchazón en el abdomen
Visitas de seguimiento
El proveedor de atención médica le hablará sobre los resultados de la prueba antes de que regrese a casa. Si le hicieron una biopsia, la muestra se examinará en un laboratorio. Los resultados tardarán unos días, tal vez una semana. Según cuáles sean los resultados de su prueba y de la biopsia, es posible que el proveedor le recomiende pruebas o tratamientos adicionales.
Riesgos y complicaciones posibles
Todos los procedimientos tienen algunos riesgos. Los riesgos posibles de la rectoscopia incluyen los siguientes:
-
Infección
-
Sangrado desde el recto (pero es normal que haya un ligero sangrado después del procedimiento)
-
Molestias abdominales leves durante y después de la prueba
-
En ocasiones poco frecuentes, perforación o desgarro en el recto
© 2000-2024 The StayWell Company, LLC. Todos los derechos reservados. Esta información no pretende sustituir la atención médica profesional. Sólo su médico puede diagnosticar y tratar un problema de salud.